En el mundo entero se está viendo cada vez más la tendencia empresarial de abrazar el cambio y transformar las empresas, con el fin de responder ante los altos niveles de disrupción y caos. Los factores económicos, climáticos, políticos y sociales están obligando a miles de compañías a reformular constantemente sus estrategias, productos y servicios para mantenerse y de ser posible, crecer. Sin embargo, uno de los roles más afectados con esta volatilidad es el del líder, ya que el contexto tan complejo sostiene un modelo de liderazgo anticuado. El liderazgo actual tiene que poder responder al cambio para que sea acorde a las tendencias. Según un estudio reciente realizado con más de 100 compañías que iniciaron procesos de cambio y transformación empresarial, tan solo el 15% de estas iniciativas tuvo éxito y dio resultados. El 85% no logró lo que buscaba con el cambio.

Por: María Adelaida Naranjo Londoño
Socia – Consultora- Coach Certificada Penta Consultoría
¿Cómo hacer entonces para Liderar y verdaderamente Cambiar?
Estar dispuestos a someternos a la misma metanoia (cambio fundamental en la mentalidad y el corazón) que queremos para nuestra organización (es decir, cambie usted como líder su mentalidad y corazón primero).
Involucrarnos en el difícil diálogo continuo que trae a la superficie aquello que está oculto en nuestra cultura y que permite que la transformación personal se traduzca en un cambio sistémico y cultural.
Reconocer el estado actual de nuestro planeta y las implicaciones reales de construir los negocios a futuro. Vivimos en tiempos en los cuales la incertidumbre de la sostenibilidad nos obliga a replantearnos nuestras decisiones, estrategias y mercados. La tecnología hace del cambio una realidad abrumadoramente acelerada. La política impacta la viabilidad de los mercados globales, así como la economía. Entonces, entra el Liderazgo efectivo a influir, ya que los líderes son los agentes de cambio por excelencia.
El liderazgo consciente es el primer paso para generar el cambio real en las empresas. Empieza, justamente, por la transformación consciente de sus líderes, no sólo desde una óptica profesional en donde se exploran sus competencias de liderazgo, sino también desde una profunda exploración del carácter personal, su creatividad y creencias.
Las competencias creativas de un Líder son: Relacionamiento, Auto-Consciencia, Autenticidad con valentía, Consciencia Sistémica y Logro. Dentro de cada una de ellas hay unas subcompetencias que especifican a profundidad la competencia mayor. El corazón es la Autenticidad, ya que invita a que los líderes sean ellos mismos, con valentía y carácter.
“Las competencias creativas de un Líder son: Relacionamiento, Auto-Consciencia, Autenticidad con valentía, Consciencia Sistémica y Logro”
Por otra parte, también se deben tener en cuenta las tendencias reactivas de los líderes frente a situaciones que se les salen de las manos. De esta forma, plantea tres tendencias de reacción: el control (forma como trato de controlar la situación teniendo la razón), la complacencia (diciendo a todo que sí por encima de lo que pienso y siento), o la lejanía (ausentarse de la situación para no enfrentarla).
Teniendo claridad acerca de las competencias creativas y tendencias de reacción es el primer paso para tomar consciencia de cómo se está ejerciendo el liderazgo. De aquí en adelante, se trabaja primero que todo en ampliar las competencias creativas y también en identificar las creencias que existen frente a las tendencias reactivas.
Un Modelo de Liderazgo realmente efectivo debe abarcar una toma de consciencia mayor que solo las competencias, así como un acompañamiento a los líderes desde la metodología de Coaching o similares.
Fuente: Revistaempresarial.com
@JuanCarlosGaitanrRuiz y @RogerioVillamizarOsorio , los invitamos a leer esta noticia, la cual será de su interés !!
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