El fabricante automovilístico alemán Volkswagen (VW) informó este martes que ha llegado a un acuerdo con los dos proveedores de componentes del grupo Prevent para reanudar sus suministros, en un pacto que pone fin a un conflicto sin precedentes en la cadena de abastecimiento de la industria del motor en Alemania.
VW informó que las fábricas afectadas retomarán la producción pero no dijo exactamente cuándo. «Las fábricas afectadas van a reiniciar de nuevo paulatinamente la producción», dijo un portavoz de Volkswagen. (Lea: Volkswagen: cómo salir de una crisis reputacional)
No obstante, ambas partes han acordado guardar silencio sobre los detalles del acuerdo al que han llegado tras veinte horas de negociación. Volkswagen, que tiene más de 600.000 empleados en todo el mundo, comenzó la semana pasada a interrumpir la producción de algunos de sus modelos en algunas fábricas en Alemania.
La compañía alemana informó el lunes de que iba a parar la fabricación del Golf y del Passat en seis fábricas en Alemania hasta finales de agosto por problemas con suministradores externos de componentes, medida que iba a afectar a casi 28.000 trabajadores. (Lea: Crece escándalo por motores trucados de Volkswagen)
El Gobierno alemán presionó y el lunes exigió a Volkswagen y a los dos suministradores de componentes que llegasen a una solución rápida en su disputa, que también afectaba a otras compañías.
La producción se iba a parar en las fábricas de Volkswagen en Emden, Wolsburg, Zwickau, Kassel, Salzgitter y Braunschweig. (Lea: Volkswagen pagará multas por escándalo de emsiones)
Los suministradores no querían proveer las piezas y acusaban a VW de abuso de poder en el mercado al haber rescindido contratos sin motivo y sin aviso previo como consecuencia de la crisis que ha generado la manipulación de las emisiones de gases contaminantes.
Las dos empresas suministradoras del grupo Prevent son Car Trim y Es Automobil Guss, son relativamente pequeñas y proveen a Volkswagen de fundas para los asientos y componentes para motores, por ejemplo.
Pero han demostrado que pueden mantener un pulso al mayor fabricante automovilístico de Europa, que en algunos componentes depende completamente de un proveedor, una estrategia comercial llamada «single sourcing» de la que es responsable el director de Compras, Javier García Sanz.
El caso servirá de precedente para otros suministradores de componentes del sector automovilístico, donde se produce una concentración y cada vez tienen más poder, aunque son los productores los que dictan los precios.
Los fabricantes componentes automovilísticos alemanes ingresaron el año pasado en Alemania 75.800 millones de euros, según cifras de la Asociación Alemana de la Industria Automotriz (VDA).
En todo el mundo los productores alemanes de componentes automovilísticos facturan entre 350.000 y 400.000 millones de euros anuales, según la empresa asesora Berylls Strategy Advisors. (Lea: Volkswagen pagará más US$ 15.000 millones por contaminación)
Los proveedores alemanes de componentes ocupan una posición de liderazgo mundial, similar a la de los japoneses.
Pero algunos fabricantes automovilísticos producen ellos mismos algunos componentes como es el caso sobre todo del grupo Volkswagen. Recientemente se han producido fusiones transfronterizas entre los principales proveedores de componentes para la industria del motor.
Bosch adquirió completamente la empresa de riesgo compartido ZF Lenksysteme, ZF Friedrichshafen compró la estadounidense TRW, el consorcio austríaco-canadiense Magna se hizo con Getrag y Mahle con la gestión térmica de la estadounidense Delphi. Bosch es el mayor proveedor, según la facturación, seguido del productor de neumáticos Continental.
Fuente: Portafolio.co
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.